Al comenzar y adentrarse en el mundo del surf siempre existen interrogantes de qué tablas necesitas para prender y luego qué tablas debes ocupar para un estilo determinado, ya cuando estás más experto.
Lo primero que debes saber es que para comenzar a surfear necesitas una tabla de gran tamaño, ojalá 8 pies y de soft (especie de tabla de espuma), tabla de gran flotabilidad y de un peso medianamente liviano.
Se recomienda que sean tablas de forma de Longboard, punta redonda y bastante ancha para la estabilidad.
Recuerda que también debes usar leash largo, de mayor tamaño que la tabla, para que cuando se te escape al caer de ella, no vuelva en contra tuya y te golpee.
Esta tabla la debes utilizar el mayor tiempo que puedas (independiente que ya te pares bien), de esa manera te preocupas de otros aspectos, como: correr olas hacia los costados, conocer el mar (corrientes, rompientes y situaciones de olas con tabla), etc…
Si ya manejas lo antes mencionado, puedes cambiar la tabla a una de fibra de vidrio, pero del mismo porte. Más avanzado en nivel, bajas el tamaño y la forma.
Acá es cuando tú puedes elegir que tipo de estilo quieres desarrollar. Puede ser rápido y radical, para ésto debes elegir una tabla de fibra, con las formas que ya estas acostumbrado a ver (las especificaciones de tablas y formas en la siguiente nota). Ésta debe estar acorde a tu tamaño y peso.
Si quieres tener un surf clásico y un poco más tranquilo, puedes ocupar un longboard, tabla larga de 9 pies. Con esta tabla, puedes caminar hasta la punta y fluir con la ola. También puedes optar por tablas retro, algo muy parecido a una tabla corta, pero un poco más anchas y punta casi redonda. Con ella puedes fluir con la ola.